viernes, 22 de abril de 2011

Homicidio....

Desnudo mis malèvolas intenciones...Mis asesinas intenciones.
Un homicidio calificado con todas las agravantes que existen en las leyes de los hombres...
Voy a asesinar este corazón de mujer no lo quiero ya...quiero que fenezca, que se vaya con la música a otra parte, quiero que me deje de doler y para eso he decidido asesinarlo.
En mis ojos de insomnio dan vueltas las ideas ..cual es la mejor forma?
Primero se me ocurrió hacerlo pedazos de la manera más cruel: Meterlo a una de esas máquinas que hacen el papel en pedacitos
y echarlo a la basura...
así nadie tendra tiempo ni quedrá hacer el esfuerzo de pegar o remendar un corazón despedazado,mucho menos sacarlo de la basura.
O sin una pizca de piedad echarlo a la mar,un naufragio (sin luz y sin camino)pa' que se seque con la sed y la sal...Quièn querría un corazón seco?
O más rápido se lo echo a un tiburón haber si lo quiere aunque
sea ya de botana...(compadezco al tuburón no estoy segura si mi cuasiodiado corazón le vaya causar indigestión,con eso de que ha padecido siempre el mal de amores)...
O el clásico asesinato de la mafia de Al Capone: Echarlo al mar envuelto en una bolsa amarrado con unas piedras para que no flote...(No recuerdo la película pero ahí dio muy buen resultado...) Mi corazón conociendolo como lo conozco seguramente le daría primero (porque no le queda otra) por flotar y segundo (estoy segura)gritaría ese espirítu desvalido para que lo rescaten.Así que triple de pesadas las piedras para no fallar!!
El cansancio llegaba ya a mis ojos y la última de las ideas fue de echarlo a una caja de máxima seguridad y ahogarlo para que muera en el olvido... Y extraviar la llave en el mejor lugar: Un mundo de llaves para que nadie la distinga entre las demás ni sepa que puede abrir un corazón de mujer ahogado en el olvido...No se donde lo oí o leí que el olvido no tiene memoria...(espero que no)
Mis ojos se cerraron y una sonrisa dulcemente malèvola curvo mis labios antes de abrazar y entregarme al sueño reparador de la alborada...

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